miércoles, 17 de agosto de 2011

Los Deportistas Impatriados se equiparan a los españoles

En efecto, a través de los presupuestos generales del estado para 2010, por fin el Ejecutivo, tras la presión de muchos sectores concluyó con una modificación del régimen especial para impatriados que no es más que una limitación de usar dicho régimen si superan las rentas que vayan a obtener por el trabajo en España en 600.000 euros, por lo cual pasarán a tributar como residentes, en vez de como no residentes (siendo residentes efectivamente)
Es decir, el Estado sobre 2005, saco a la luz, una ley, por la que cualquier ciudadano extrangero que viniera a trabajar en España mediante un contrato de trabajo y con unos requisitos específicos podría tributar como no residente durante el plazo de 5 años, aún siendo residente y debiendose acoger a la legislación sobre el IRPF, pero podría acogerse durante ese plazo al LIRNR, siendo menor su tributación.
En principio se pensó en atraer talento, personal de investigación, altos directivos, capaces de generar un valor añadido a la Nación, pero pronto se empezó a utilizar por los deportistas de élite como futbolistas, tenistas, golfistas, así como por artístas que se querían afienzar en España.

Por ello, este régimen fiscal especial para los deportistas (y en fín, para todos los extranjeros que vengan a España), se suprime y tendrán que tributar desde 2010 en adelante al tipo máximo del 43%. Ya que la mayoría de los deportistas de alto nivel, como pueden ser los futbolistas deberán hacerlo así, por ello los clubes de futbol a igualdad de condiciones, ya que són ellos quien asumen la carga tributaria de esos mayores impuestos están fichando a más jugadores españoles, vease que la LFP, (liga de futbol profesional), ha dado como dato a finales de agosto de 2011, que los fichajes en primera y segunda división hasta el momento han sido 613, clasificandose en 322 españoles, comunitarios 55, y 36 extranjeros, lo que hace que se contrate a más futbolistas españoles que en años pasados, donde el club se ahorraba un 19% en tributación por que al pactar neto cuando fichaban a un jugador, costaba menos a las arcas de club que fuera comunitario o extranjero a que fuera español.